La cooperativa textil ubicada en calle Roca, con más de dos décadas de trayectoria en Esquel, recibió este miércoles la visita del intendente Matías Taccetta, el secretario de Gobierno Diego Austin, y la directora de Desarrollo Productivo y Emprendedorismo, Paula Botto. El motivo: la entrega de una nueva máquina industrial, clave para fortalecer la producción y abrir nuevas oportunidades laborales.
Paula Boto explicó que la entrega surge de un pedido de las propias integrantes de la cooperativa, quienes identificaron la necesidad de ampliar la producción de ropa de trabajo, un rubro en crecimiento.
La máquina (gestionada junto a la Secretaría de Trabajo de Chubut) permite triple costura reforzada, esencial para la confección de mamelucos y prendas de alta durabilidad.
“Les va a permitir trabajar más rápido, con mayor eficiencia y con productos más durables”, destacó Boto. La inversión ronda los 2 millones de pesos y fue realizada en un comercio local, promoviendo también la economía esquelense.
Más producción, más empleo y consumo local
Para la Municipalidad, el objetivo es sostener y fortalecer las unidades productivas locales, especialmente en un contexto económico complejo.
“Las chicas vienen sosteniendo la cooperativa hace muchos años, con buenas épocas y otras no tanto. Esta nueva máquina les amplía el panorama y permite que puedan proveer no solo a vecinos y comercios, sino también a municipios y empresas constructoras”, señaló Botto.
El intendente ya solicitó a la cooperativa los listados de talles de mamelucos que utiliza el Municipio para que sean ellas quienes confeccionen la próxima entrega prevista para marzo.
Las integrantes de la cooperativa destacaron que la máquina representa un salto de calidad y de tiempo en la producción:
- “Antes hacíamos la triple costura con varias máquinas y muchas pasadas. Ahora, en una sola pasada salen las tres costuras juntas”.
- “Tenemos overlock, rectas y máquinas de terminación, y todas se usan. Pero esta máquina completa lo que nos faltaba para los mamelucos”.
La cooperativa trabaja para empresas, instituciones, escuelas y vecinos de toda la zona. Sin embargo, en los últimos años la demanda bajó: “Desde el año pasado sentimos mucho la caída. Antes, para esta época, teníamos pedidos de buzos de egresados todo el año. Hoy tuvimos solo dos”.
Con 23 años de historia, la cooperativa atravesó momentos difíciles, pero siempre se sostuvo: “Nos reinventamos todo el tiempo”, dijeron, mencionando la confección de camisas para el Día de la Madre como ejemplo de esa búsqueda constante.
Una de las socias no estuvo presente porque, debido a la baja producción, no están pudiendo convocarla todos los días. “Aun así, seguimos adelante”, remarcaron.
Invitación a la comunidad
Las trabajadoras invitaron a los vecinos a acercarse al local, conocer los productos y apoyar la producción local: “Estamos enfocándonos en los mamelucos, vamos a poner toda nuestra energía en eso. La calidad de las telas y las costuras es excelente, y ahora con esta máquina vamos a trabajar más rápido y mejor”.
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