Porque si algo tiene el invierno, es esa habilidad mágica de convertir cualquier plato caliente en un abrazo para el alma. Acá te contamos cuáles son las comidas que más se disfrutan cuando las temperaturas bajan más que las ganas de salir de la cama.

🍲 Guisos, los reyes del invierno
Lentejas, porotos, arroz con pollo o ese famoso «lo que hay en la heladera con mucho condimento». Los guisos son democráticos, abundantes y rinden para varios tuppers. Ideal para comer y volver a la cama… o al trabajo con panza llena y corazón contento.

🍝 Pastas caseras: nivel abuela ON
¿Quién puede resistirse a unos tallarines con estofado, ñoquis con salsa o una buena lasaña? Las pastas nos consuelan, nos unen y además son excusa para abrir una botella de vino (por el frío, obvio).

🍫 Chocolate caliente y postres calentitos
Porque el invierno también tiene su parte dulce: chocolate con leche espeso, budines tibios, arroz con leche o tortas recién salidas del horno. ¿La clave? No contar las calorías hasta septiembre

🍞 Sopas, caldos y pancito al lado
De zapallo, de cebolla, de lo que haya. Las sopas no solo te reconfortan: también sirven para justificar el pancito con manteca al costado. Y si se trata de sopa casera, es puro mimo.

Bonus track: comidas que abrigan el alma

• El asadito bajo techo con salamandra cerca
• Las empanadas recién horneadas (nivel lava volcánica)
• Las tortas fritas con mate cuando cae nieve o llueve

Consejo final:
No te preocupes si comés un poco de más. El cuerpo «gasta más energía en invierno» (esto no lo comprobamos, pero nos gusta pensarlo así). Aprovechá para disfrutar lo simple, lo calentito y lo rico.

Y vos… ¿qué plato no te puede faltar en invierno?
Contanos y armamos el menú de toda la semana.

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