En equipo con su colega Mariela Carranza, diseñaron un prototipo de robot educativo pensado especialmente para el nivel inicial, al que bautizaron “Trochita Bot”, en homenaje al histórico tren patagónico.
La capacitación, orientada a docentes de todos los niveles educativos, brindó formación en diseño de prototipos, robótica educativa y programación, adaptada a cada etapa escolar. “Fue mi primera experiencia en robótica. No tenía conocimientos de electrónica ni programación, y hoy estoy armando circuitos, aprendiendo herramientas nuevas y aplicándolas en el aula”, compartió Cinthia con entusiasmo.
El Trochita Bot está diseñado para niños y niñas de 3 a 5 años, y permite que los pequeños comiencen a explorar nociones básicas de programación y pensamiento lógico, como secuencias de dirección y comandos simples.
“Aunque trabajamos en un jardín maternal, es importante que los docentes estemos en constante formación. Hoy hablamos de robótica, inteligencia artificial y nuevas tecnologías que también deben llegar a la infancia”, reflexionó.
Actualmente, González continúa su formación en la segunda etapa de la capacitación, «Mi Primer Robot II», perfeccionando el diseño del prototipo original y sumando nuevas funcionalidades al proyecto.
La experiencia, desarrollada en modalidad virtual, también permitió un proceso colaborativo y creativo a distancia. Gracias al reconocimiento obtenido, ahora podrán materializar físicamente el robot con impresión 3D y avanzar en la implementación real en contextos educativos.
Este proyecto demuestra que la innovación pedagógica y el uso de tecnologías emergentes también tienen un lugar clave en el nivel inicial, fomentando desde los primeros años el desarrollo del pensamiento computacional y creativo en las infancias.
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