La medida fue consensuada en una reunión entre autoridades de Argentina y Chile, con competencia directa sobre el Paso Internacional Río Futaleufú, tras evaluar el impacto de las bajas temperaturas en la infraestructura del complejo fronterizo.
Del lado argentino, la Gendarmería Nacional informó que el suministro de agua quedó interrumpido debido al congelamiento total de las cañerías, internas y externas. Esta situación impide el funcionamiento habitual del puesto.
El comunicado difundido por el Escuadrón 36 Esquel indica que el cierre operará “hasta que las condiciones meteorológicas posibiliten el normal funcionamiento de las instalaciones y se reestablezca el servicio de agua, siendo aproximadamente el día 29 julio”.
Chile confirmó daños y cierre
El Gobierno de Chile, a través de su Unidad de Pasos Fronterizos, también notificó el cierre por tiempo indefinido, mencionando daños estructurales en las dependencias ubicadas del lado argentino del Paso Río Grande.
Ambos países autorizaron el paso únicamente a ambulancias y vehículos de emergencia, mientras se mantenga la situación. Se recomienda a viajeros y transportistas consultar fuentes oficiales antes de planificar traslados.
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