Reyes recordó que estos juegos, con 32 años de historia, nacieron como un símbolo de paz entre Argentina y Chile y se desarrollan en toda la Patagonia de ambos países. La baja de Tierra del Fuego generó preocupación, pero rápidamente se convocó a una reunión de emergencia con todas las autoridades deportivas patagónicas.
La propuesta más firme provino de La Pampa, cuyo gobernador ofreció albergar la competencia. Sin embargo, la decisión final depende también de la organización chilena y de ajustes logísticos importantes, dado que muchos equipos ya tenían pasajes para viajar a Ushuaia.
“Hay un compromiso total de todas las provincias para salvar los juegos. La próxima semana, a más tardar el miércoles, tendremos la definición. Si se realizan, será en La Pampa y no en octubre, sino entre fines de noviembre y principios de diciembre”, adelantó Reyes.
El dirigente subrayó que Chubut “pondrá todo de sí” para que este evento emblemático, que moviliza a cientos de jóvenes deportistas, no se suspenda.
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